LA PRIMAVERA .
Comienza saturando ya el ambiente,
la estación más
sublime de Natura,
llenando el campo
de flores y verdura
y el corazón de fe
y amor ardiente.
El ignívomo sol incandescente
brilla radiante de
intensa purpurina,
y con gran
majestad su luz declina,
ciñendo los
cendales del poniente.
Con cadencias armónicas y suaves,
las mimosas
parejas de las aves
fabrican con amor
su dulce nido,
ya en la orilla del tímido regato,
deslizando en
susurro dulce y grato,
ya en la jara y
romero florecido.
Aurora Rodríguez y Moratinos.
Profesora de Enseñanza - Trefacio –